[article pii="nd"
doctopic="oa" language="es" ccode="CAICYT"
status="1" version="4.0" type="ilus gra"
order="13" seccode="cds010" sponsor="nd"
stitle="Cienc. suelo" volid="33" issueno="2"
dateiso="20151200" fpage="0" lpage="0"
issn="1850-2067"]
[front][titlegrp][title language="es"]ANÁLISIS GEOESPACIAL DEL ÍNDICE DE ADSORCIÓN (Kd) DE ATRAZINA CALCULADO SEGÚN CARTAS DE SUELOS Y MUESTREO EN GRILLA[/title][/titlegrp]
[authgrp][author
role="nd"][fname]MIGUEL ALEJANDRO [/fname][surname]BECERRA[/surname][/author]1*; [author
role="nd"][fname]SUSANA [/fname][surname]HANG[/surname][/author]2 & [author
role="nd"][fname]MARTÍN [/fname][surname]DÍAZ-ZORITA[/surname][/author][/authgrp]3
1 CONICET.
2 Facultad de Ciencias Agropecuarias, Universidad Nacional de Córdoba.
3 CONICET (INBA) y Novozymes Bioag S.A.
* Autor de contacto: mabecerra@agro.unc.edu.ar
Recibido: 19-11-14
Recibido con revisiones: 03-08-15
Aceptado: 03-08-15
[bibcom]RESUMEN
[abstract language="es"]Las cartas de suelos reúnen
abundante información, a veces subutilizada, de propiedades edáficas,
distribución y variabilidad de los suelos a escala regional. Mediante funciones
de edafotransferencia es posible generar información sobre nuevos atributos. El
propósito de este estudio fue caracterizar la variación espacial del índice de
retención, Kd, de atrazina (6-Cloro-N2-etil-N4-isopropil-1,3,5-triazina-2,4-diamina) calculado a partir de dos fuentes
de datos: un muestreo reciente (Kdm) y las cartas de suelo (Kd
estimado) y evaluar el desempeño de diferentes métodos de utilización de los
datos de las cartas de suelos para su estimación. Para los Kd estimados se
evaluaron cinco métodos de obtención: uno con los datos analíticos de la serie
predominante de la unidad cartográfica, otro tomando un promedio ponderado en
base a la participación de las series en la unidad cartográfica y los restantes
según tres criterios de interpolación. Se trabajó en dos sistemas hidrológicos
con características edáficas contrastantes: Morteros (SHM) y Río Quinto (SHRQ).
Los Kdm de SHM se distribuyeron desde bajos a altos con un promedio
de 2,03 ±
Palabras clave. [keygrp scheme="nd"][keyword type="m" language="es"]Variabilidad espacial, criterios de interpolación, SIG, riesgo ambiental[/keyword][/keygrp].
GEOSPATIAL ANALYSIS OF ATRAZINE ADSORPTION INDEX (Kd)
AS CALCULATED BY SOIL MAPS AND GRID SAMPLING
ABSTRACT
[abstract
language="en"]Soil surveys provide information,
sometimes under-used, about distribution and variability of soil
characteristics at a regional scale. Pedotransfer functions generate
information on new soil attributes. The purpose of this study was to
characterize the spatial variability of the atrazine
(6-chloro-N2-ethyl-N4-isopropyl-1,3,5-triazine-2,4-diamine)
retention index, Kd, calculated from two data sources: soil surveys (estimated
Kd) and a recent regional soil sampling (Kdm); and to assess
different methods to estimate Kd at the regional scale from soil surveys data.
To obtain the estimated Kd, five methods were
assessed: one using the data of the predominant soil series of the cartographic
unit, another using the weighted arithmetic mean of the data of the soil series
within the cartographic unit, and the remaining three from different
interpolation methods. Two hydrological units with contrasting soil
characteristics were studied: Morteros (SHM) and Río Quinto (SHRQ). Kdm corresponding
to SHM oscillated from low to high with an average of 2.03 ±
Key words. [keygrp
scheme="nd"][keyword type="m" language="en"]Spatial
variability, interpolation criteria, GIS, environmental risk[/keyword][/keygrp].[/bibcom][/front]
[body]INTRODUCCIÓN
La cartografía de suelos ha contribuido al conocimiento, localización, distribución y planificación del aprovechamiento de los recursos agropecuarios de una manera objetiva, práctica y sencilla (López et al., 1981). Las cartas de suelos constituyen un valioso inventario de los diferentes tipos de suelo, su extensión y distribución espacial, por lo que pueden utilizarse para hacer predicciones acerca de las cualidades y potencialidades de esos suelos (Manchanda et al., 2002). Mediante el uso de funciones de edafotrans-ferencia estas cualidades pueden ser derivadas a partir de las características descriptas en las cartas para esos suelos (Wagenet et al., 1991). Sin embargo, los estudios regionales que utilicen la información de las cartas de suelos enfrentan la limitante de la incertidumbre con respecto a la certeza de los datos publicados (Sonneveld et al., 2002). La vigencia de la información de las cartas de suelo ha sido motivo de diversos estudios. A modo de ejemplo, la disminución del contenido de carbono orgánico (CO) es un rasgo recurrente señalado para cartas de suelos de Gales e Inglaterra (Bellamy et al., 2005), en lugar de; Nueva Zelanda (Schipper et al., 2007) y Bélgica (Stevens & van Wesemael, 2008); para suelos de la región pampeana argentina, Berhongaray et al. (2013) reportaron una disminución del contenido de CO desde la introducción de la agricultura, aunque tal disminución sería previa a la época de confección de las cartas de suelos, no ocurriendo mayores cambios desde ese momento hasta la actualidad.
Los sistemas de información geográfica (SIG) en aplicaciones agrícolas constituyen una herramienta útil en la toma de decisiones (Petersen et al., 1995). Uno de los aspectos de mayor utilidad ha sido el estudio de la variabilidad espacial de suelos y la predicción de valores de atributos en sitios no muestreados a través del uso de las interpolaciones (Henríquez et al., 2005). Cuando se conoce el tipo de suelo de un sitio y es necesario estimar una propiedad, frecuentemente se recurre a utilizar el valor típico o un valor promedio para ese tipo de suelo. Sin embargo, ese enfoque presenta dos falencias; la primera es que no considera la variabilidad espacial del atributo dentro de cada tipo de suelo, y la segunda se refiere al cambio abrupto de los atributos entre un determinado tipo de suelo y el vecino. Este problema puede, en ocasiones, ser reducido a través del uso de métodos geoestadísticos como el kriging que considera la correlación espacial entre observaciones dentro y entre tipos de suelos (Goovaerts &Journel, 1995).
Cuantificar la retención de agroquímicos en el suelo es fundamental para entender y predecir su destino y transporte en el ambiente (Jayasundera et al., 2000). La retención se parametriza mediante índices tales como el Kd que relaciona la concentración del agroquímico entre la fase sólida y la solución. Sin embargo, una limitación es el uso de un mismo valor de Kd y su extrapolación a áreas extensas (Elabd et al., 1986). Dado que el Kd depende de las características de la molécula y de los atributos de suelo debiera ser considerado igual que cualquier otro parámetro del suelo sujeto a variación espacial, y por lo tanto, apto para cualquier metodología dedicada al análisis espacial.
La evaluación cuantitativa de la variabilidad espacial de los Kd es necesaria dado que las salidas de los modelos de simulación de destino de agroquímicos son muy sensibles al valor de entrada del índice de adsorción (Coquet & Ba-rriuso, 2002). No obstante, estas evaluaciones cuantitativas parecen ser escasas dado que la mayoría de los estudios de modelación estocástica que evalúan la variabilidad de la adsorción se apoyan en datos espaciales de contenido de CO en lugar de datos de Kd (Coquet & Barriuso, 2002).
Este trabajo tuvo dos objetivos. El primero fue evaluar la variación espacial del Kd de atrazina (6-Cloro-N2-etil-N4-isopropil-1,3,5-triazina-2,4-diamina), tomado como herbicida indicador, calculado a partir de dos fuentes de información: cartas de suelos y un muestreo regional reciente. El segundo objetivo fue valorar la precisión de métodos para la estimación de Kd a escala regional a partir de la información de las cartas de suelo.
MATERIALES Y MÉTODOS
Se recopiló la información del horizonte superficial de los suelos de la provincia de Córdoba a partir de las cartas de suelos (escala 1:100.000 y 1:50.000) y del mapa digital de suelos (escala 1:500.000) provisto por GeoINTA (2012). Se registraron los valores de materia orgánica del suelo (MOS), arcilla (ARC) y pH (relación suelo:agua 1:2,5) del perfil modal de cada serie. Como mapa base se utilizó el mapa de unidades cartográficas (UC) 1:500.000 debido a que no existen mapas de suelo a escala de mayor detalle para la totalidad de la provincia.
Entre 2012 y 2014 se llevó a cabo un
muestreo en grilla de
Figura
Figure
La zona correspondiente al SHM tiene su
límite Oeste en la zona de sierras con altitud de hasta
En cada sitio se tomó una muestra de suelo
de
Se calculó el valor de Kd de atrazina a
partir de la ecuación de Weber et al. (2004) ''Kd = 4,1 + 0,43 MOS +
0,09 ARC -0,81 pH'' [Ec. 1], modelo matemático previamente validado (Becerra et
al., 2013). A partir de los datos del muestreo se calculó el Kd
correspondiente a cada sitio de muestreo (Kdm). Para el cálculo del
Kd de cada UC se utilizaron dos metodologías: a) según procedimiento descripto
en Becerra et al. (2013) que utiliza el promedio ponderado de cada
componente de
Se evaluaron dos métodos de interpolación, kriging
ordinario (KO) y kriging universal (KU) cuyos parámetros fueron
obtenidos utilizando el paquete geoestadístico geoR (Ribeiro Jr. & Diggle,
2001) en entorno R (R Core Team, 2014). Se evaluaron tres modelos teóricos para
ajustar el variograma (esférico, gaussiano y exponencial) utilizando como
criterio de selección el de mínima suma de cuadrados ponderados. En todos los
casos se comprobó, mediante el histograma, que las distribuciones de las
variables a interpolar fueran normales o cercanas a la normal. Para cada sitio
de muestreo se calcularon los valores de Kd producto de los diferentes métodos
de interpolación; del KO de los valores de Kdc y Kdp se
obtuvieron valores de Kdkoc y Kdkop respectivamente,
mientras que del KU de los valores de Kd se obtuvieron valores de Kd . En todos c kuc los casos cuando el Kd calculado fue
menor a cero, su valor fue reemplazado por
Se realizaron análisis de regresión lineal a fin de determinar el grado de ajuste entre los valores de Kdm y los estimados a partir de las cartas de suelos (Kd , Kd , Kd , Kd y Kd ); c p koc kop kuc así como también se analizaron las diferencias entre Kdm y los Kd estimados para cada sitio de muestreo (errores de estimación). Para los análisis estadísticos se utilizó el programa Infostat Kd calculados a partir de datos muestrales y estimados con las cartas de suelos
El rango de valores de Kdm fue de
La información de las cartas de suelo puede considerarse vigente ya que las mayores diferencias se dieron en atributos poco variables en el tiempo, como es el caso de ARC (Allred et al., 2008; Berhongaray et al., 2013). Las diferencias de ARC fueron aleatorias (Becerra et al., 2014), por lo cual no se puede considerar un error sistemático asociado a la metodología de determinación. Por otra parte, no se dispone de información de la técnica utilizada para obtener los datos de cartas de suelo, ya que fueron determinados en diferentes épocas y laboratorios. Si bien el pH del suelo puede modificarse en el tiempo, en general se han reportado descensos (Liebig et al., 2002; Vázquez, 2005 citado en Sainz Rosas et al., 2007) o estabilidad en el tiempo (Krüger, 1996; Díaz-Zorita et al., 2004). El reemplazo de la vegetación natural por cultivos ha traído aparejado, en muchos casos, procesos de erosión, salinización y so-dificación (Jayawickreme et al,, 2011) en particular en la zona centro Sur de Córdoba (Canale, 2011), en la cual se encuentra la región SHRQ que se discutirá más adelante.
Análisis por regiones de muestreo
Las medidas resumen de los índices Kd , Kd , Kd calculados para ambos sistemas hidrológicos,
SHM y SHRQ, se presentan en
Para el SHM los índices Kd
, Kd y Kd no presentaron diferencias significativas entre ellos, si bien
los Kdm superaron a los otros dos. En los datos del muestreo se
identificó mayor contenido de ARC (5 puntos porcentuales) que generó un
incremento de
Tabla 1. Medidas resumen de los Kd calculados con datos
muestrales (Kdm) y estimados a partir de las cartas de suelos (Kdc
y Kdp) correspondientes los sistema hidrológicos Morteros (SHM) y
Río Quinto (SHRQ).
Table 1. Summary
statistics of Kd values calculated from sampling data
(Kdm) and estimated from soil survey data (Kdc y Kdp)
corresponding to Morteros (SHM) and Río Quinto (SHRQ) hydrological units.
Sistema |
Variable |
n |
Media |
DE |
CV |
Máx |
Min |
Mediana |
Q1 |
Q3 |
|
Kdm |
86 |
2,03 |
0,87 |
43 |
4,58 |
0,01 |
1,98 |
1,45 |
2,57 |
SHM |
Kd c |
83 |
1,91 |
1,01 |
53 |
4,18 |
0,01 |
1,85 |
1,24 |
2,21 |
|
Kd p |
83 |
1,87 |
1,02 |
54 |
4,33 |
0,18 |
1,95 |
1,15 |
2,10 |
|
|
45 |
0,79 |
0,71 |
90 |
3,5 |
0,01 |
0,58 |
0,30 |
1,22 |
SHRQ |
Kdc |
43 |
1,14 |
0,44 |
39 |
2,17 |
0,2 |
1,02 |
0,90 |
1,45 |
|
Kdp p |
43 |
1,13 |
0,53 |
47 |
2,14 |
0,4 |
1,06 |
0,75 |
1,49 |
n: número de observaciones, DE: desvío estándar, CV: coeficiente de variación; Mín: valor mínimo; Máx: valor máximo; Q1: primer cuartil; Q3: tercer cuartil.
La distribución de frecuencias de los Kd de
cada región se muestra en
La distribución de los Kd en cada sistema
hidrológico presentó diferencias en el rango de valores. En un trabajo previo
(Becerra et al., 2013) se establecieron tres categorías de valores de Kd
<
Comparativa entre métodos de estimación
La distribución espacial de los Kd obtenidos de las cartas de suelos para los sitios de muestreo mostró una cierta tendencia creciente en sentido oeste-este asociada a los patrones de distribución de arcilla y materia orgánica. Esta tendencia fue de primer orden (lineal) y fue removida al estimar Kdkuc en función de Kdc. Para el ajuste de los semi-variogramas experimentales se probaron tres modelos teóricos: esférico, exponencial y gaussiano. Los modelos de mejor ajuste, que minimizaron la suma de cuadrados y se utilizaron para realizar el kriging, fueron el esférico para el caso de Kdc y el exponencial para Kdp y los residuos de Kdc.
Los valores de Kd estimados según diferentes
métodos se presentan en
El análisis de regresión lineal entre los Kdm y los Kd estimados a partir de datos de las cartas de suelos, mostró mejor ajuste para el caso de las interpolaciones: Kdkoc (R2=0,28), Kdkop (R2=0,29) y Kdkuc (R2=0,28) con respecto al uso del mapa de suelos: Kdc (R2=0,15) y Kdp (R2=0,12). Entre los diferentes métodos de interpolación no se encontraron mayores diferencias.
Se calculó la diferencia entre el promedio
de los Kdm y el promedio del los Kd promedio estimados. Para el SHM
el Kdm promedio superó en ~
Tabla 2. Valores de Kd (L kg-1) estimados por
interpolación por diferentes métodos para el sistema hidrológico Morteros (SHM)
y el sistema hidrológico Río Quinto (SHRQ).
Table 2. Kd values (L kg-1) estimated from different
methods corresponding to Morteros (SHM) and Río Quinto (SHRQ) hydrological
units.
|
Variable |
n |
Media |
DE |
CV |
Mín |
Máx |
Mediana |
Q1 |
Q3 |
|
Kdkoc koc |
SB |
1,93 |
0,72 |
37 |
1,0B |
3,S9 |
1,70 |
1,4S |
1,99 |
SHM |
Kdkop kop |
SB |
1,95 |
0,72 |
37 |
1,01 |
4,01 |
1,74 |
1,55 |
2,12 |
|
Kdkuc kuc |
SB |
1,93 |
0,72 |
37 |
1,0S |
3,97 |
1,72 |
1,45 |
2,03 |
|
Kdkoc koc |
45 |
1,10 |
0,25 |
22 |
0,B0 |
1,5S |
1,13 |
0,91 |
1,2B |
SHRQ |
Kdkop kop |
45 |
1,05 |
0,31 |
30 |
0,5B |
1,S4 |
0,95 |
0,SS |
1,17 |
|
Kdkuc kuc |
45 |
1,09 |
0,25 |
23 |
0,59 |
1,B0 |
1,13 |
0,92 |
1,25 |
ri: nùmero de observaciones, DE: desvío estándar, CV: coeficiente de variación; Min: valor mínimo; Máx: valor máximo; Ql: primer cuartil; Q3: tercer cuartil.
Por otra parte, para el SHRQ el valor de Kdm
promedio fue inferior en ~
La interpolación por kriging tiende a concentrar los valores hacia la media de la población (Johnston, 2001) lo que explica que los rangos de los Kd interpolados sean más estrechos que los de Kd no interpolados, lo cual también se aprecia en los menores CV (Tabla 1 y 2).
Se calculó el error de predicción para cada sitio de muestreo como la diferencia entre el Kd y los Kd estimados por los diferentes métodos. La distribución de los errores absolutos para cada método se resume en Tabla 3. La interpolación, en sus tres modos (Kdkoc, Kdkop y Kdkuc), produjo menores errores (p <0,1), lo que se refleja en un promedio más bajo y un rango de variación más estrecho que se aprecia tanto entre los valores máximos y mínimos como en el rango intercuartílico (Q3 - Q1). Este comportamiento se comprobó tanto para SHM como para SHRQ. Los resultados obtenidos mediante el uso de KO y KU no difirieron entre ellos aún cuando se observó cierta tendencia en los datos.
La representación gráfica de la dispersión
entre Kdm y los errores absolutos (Fig. 5) muestra que las mejores
estimaciones se obtuvieron para los valores de Kd intermedios
independientemente del método de estimación. La distribución de los errores en
función de Kdm puede ser modelada por una función cuadrática [error
(abs) = 1,05 -0,82 Kd + 0,28 Kd 2]. De la ecuación se puede deducir
el rango de Kd donde los errores son menores o iguales a
Al comparar los casos en que los Kdm
fueron predichos con errores menores o iguales a
La escala de los mapas parece ser un factor importante al momento de considerar la conveniencia de la interpolación, ya que estudios previos documentaron que no existieron diferencias significativas entre los mapas temáticos derivados de mapas de suelo de propósito general a escala 1:5000 con los mapas obtenidos por KO a partir de datos muestrales (Bregt etal., 1987). Brus etal. (1996) tampoco encontraron grandes diferencias entre el kriging y la media de las unidades de mapa a escala 1:50.000, remarcando los menores costos de muestreo cuando se emplean las unidades de mapa. Estos resultados alientan el uso de los mapas de suelos ya que componen una amplia base de datos de suelo. Una alternativa que sugieren algunos autores al momento de interpolar, consiste en utilizar la información de los mapas de suelos sobre aspectos geológicos, pedológicos, de relieve, límites naturales, etc. (Heuvelink & Bierkens, 1992; Brus et a/.,1996). Sin embargo, remarcan que estratificar por unidad de mapa y luego krigear internamente tiene dos desventajas, una es que se reducen la cantidad de puntos para calcular el variograma y la otra es que se considera que las unidades están separadas por límites estrictos y por lo general no es así. En nuestro estudio la limitada cantidad de datos por unidad de mapa hizo impracticable evaluar esta metodología.
La distribución espacial de los índices Kd , Kd y Kd correspondientes a SHM y SHRQ se muestran en las Figuras 4 y 5, respectivamente. Los mapas producto de interpolaciones (Kdkoc y Kdm) muestran una transición gradual entre zonas con diferente adsorción de atrazina debido a la "suavización" de valores característica del kriging (Goo-vaerts, 1997). En estos mapas se puede apreciar claramente las características contrastantes de los dos sistemas hidrológicos, encontrándose en el SHM un predominio de Kd medios con presencia de Kd bajos (Norte y/o Sur según el mapa) y altos (Este), mientras que el SHRQ está dominado ampliamente por Kd bajos.
Figura 4. Distribución
espacial, en la región del sistema hidrológico Morteros, de los índices de
adsorción de atrazina (Kd) estimados según mapa de unidades cartográficas [Kdc]
(a), interpolación por kriging ordinario de los valores de Kdc
del centroide de cada unidad cartográfica [Kdkoc] (b) y por
interpolación por kriging ordinario de valores muestrales [Kdm]
(c).
Figure 4. Spatial
distribution of atrazine adsorption indices (Kd) for Morteros hydrological unit
area estimated from cartographic units map [Kdc] (a), kriging
interpolation of Kdc values of the centroid of each cartographic
unit [Kdkoc] (b) and kriging interpolation of Kd values calculated
from sampling [Kdm] (c).
Figura 5. Distribución
espacial, en la región del sistema hidrológico Río Quinto, de los índices de
adsorción de atrazina (Kd) estimados según mapa de unidades cartográficas [Kdc]
(a), interpolación por kriging de los valores de Kdc del
centroide de cada unidad cartográfica [Kdkoc] (b) y por
interpolación por kriging de valores muestrales [Kdm] (c).
Figure 5. Spatial distribution of atrazine adsorption indices
(Kd) for Río Quinto hydrological unit area estimated from cartographic units
map [Kdc] (a), kriging interpolation of Kdc values of the
centroid of each cartographic unit [Kdkoc] (b) and kriging
interpolation of Kd values calculated from sampling
[Kdm] (c).
CONCLUSIÓN
En un estudio previo se sugirió que las cartas de suelos, aún cuando representan una fuente de datos muy útiles para estudios regionales, pueden estar desactualizadas, destacando la necesidad de generar una base de datos actualizada o corroborar la vigencia de dichas cartas.
Nuestros resultados sugieren que a la información provista por las cartas de suelo, aún cuando daten de largo tiempo y a escala de reconocimiento (1:500.000), es posible revalorizarla y ampliar el aporte de este material, si se incorporan métodos de análisis por interpolación. El cálculo del Kd de atrazina a partir de los datos de las cartas de suelo no difirió sustancialmente del obtenido a partir de un muestreo actual.
Las dos zonas analizadas presentaron
características diferentes en cuanto a su capacidad de adsorción de atrazina.
La zona del sistema hidrológico Morteros tuvo un Kd promedio de 2,0 ±
La estimación del Kd de atrazina a partir de
las cartas de suelo resultó más confiable en el rango de Kd de
[/body] [back]AGRADECIMIENTOS
Este trabajo fue financiado mediante proyecto ANPCyT PICT 0250/10.
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